miércoles, 5 de diciembre de 2007

Racismo Escolar

Un estudio de la UGR subraya la necesidad de educar en valores para evitar el racismo en las aulas.Un 63% de los alumnos de enseñanzas medias son igualitarios, un 10% son racistas manifiestos o abiertos y un 27% de los menores son racistas sutiles. La investigación muestra que los niños son más racistas que las niñas.Es evidente que las corrientes de inmigración en España han cambiado. Ahora son los ciudadanos
provenientes de América del Sur, principalmente, y del norte de África, los que traspasan las fronteras y entran a formar parte de la sociedad multicultural en la que vivimos. Pero ¿cómo perciben ésta situación los menores?

Según se desprende de un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada “sí existen prejuicios raciales entre los más jóvenes”.En el estudio han participado más de doscientos alumnos de diferentes Centros de Enseñanza Secundaria de la provincia de Granada. Los investigadores responsables del proyecto han adaptado y validado los instrumentos disponibles para la evaluación del racismo en adultos, a escolares con edades comprendidas entre los 12 y 14 años. Esto les ha permitido analizar los prejuicios raciales tanto sutiles como manifiestos en los menores. Prejuicio racial Se considera que la forma sutil del racismo es aquella que se hace desde la distancia y resulta “más fría” e indirecta, mientras que el racismo manifiesto, además de estar más mal visto en nuestra sociedad, se presenta de manera más directa, abierta, intolerante y cercana.Los resultados que se extraen del estudio señalan que, el 63% de los alumnos son igualitarios. Un dato más que esperanzador para las nuevas generaciones.


Sin embargo, un 27% de los escolares son racistas sutiles, y un 10% son racistas manifiestos o abiertos.Sutiles con la edadLos investigadores han encontrado diferencias significativas respecto a la edad de los escolares. Aunque el racismo manifiesto representa una minoría de los casos estudiados, éste predomina en los alumnos más pequeños. Por su parte, el racismo sutil se acentúa a medida que los alumnos son mayores. Es precisamente en estos últimos, donde los investigadores han observado un paralelismo con el comportamiento en adultos. Tanto en éstos como en niños mayores y adolescentes, se da una supresión de expresiones racistas abiertas pero se mantienen las sutiles como por ejemplo, la exageración de las diferencias culturales, pensar que las personas son muy diferentes unas de otras, defender los valores propios o manifestar menos emociones positivas hacia las minorías.Según los expertos, es a partir de los 13 años cuando el racismo manifiesto disminuye y pasa a su forma sutil.En cualquiera de sus escalas, los investigadores afirman que los niños son más racistas que las niñas. Esto podría deberse a que “los varones tienen actitudes y valores sociales algo diferentes y se ven afectados por otras influencias sociales y familiares, lo que les hace asumir un rol diferente al de las mujeres”.Entre las medidas a adoptar, los investigadores abogan por potenciar la Educación en Valores tanto en el ámbito familiar como en el escolar, como componente primordial en el desarrollo personal y social infantil, trabajar en los menores el respeto por las tradiciones y culturas diferentes, y fomentar el acercamiento social.

martes, 4 de diciembre de 2007

Racismo de Estado: Michael Foucault




Vivir y dejar morir

En una tecnología de poder que tiene como la vida ¿Cómo se ejerce el derecho de matar y la función homicida, si es verdad que el poder soberano retrocede cada vez más y el biopoder, disciplinario y regulador, avanza siempre más?.

Aquí interviene el racismo:
1) Introduce una separación entre lo que debe vivir y lo que debe morir. Será un modo de fragmentar y producir un desequilibrio en el campo de lo biológico que el poder tomó a su cargo, mediante la jerarquización y la calificación de razas como buenas y malas.
2) Establece una relación positiva entre la muerte del otro y la vida de uno en clave no guerrera, sino biológica."La muerte del otro - en la medida en que representa mi seguridad personal - no coincide simplemente con mi vida. La muerte del otro, la muerte de la mala raza, de la raza inferior (o del degenerado o del inferior) es lo que hará la vida más sana y más pura".
"Este mecanismo podrá funcionar justamente porque los enemigos que se quiere suprimir no son los adversarios, en el sentido político del término, sino que son los peligros, externos o internos, en relación con la población y para la población. En otras palabras: el imperativo de muerte, en el sistema de biopoder es admisible sólo si se tiende a la victoria no sobre adversarios políticos, sino a la eliminación del peligro biológico y al reforzamiento directamente ligado con esta eliminación de la especie misma o de la raza.

La raza, el racismo, son en las sociedades modernas la condición de la aceptación del homicidio. Desde el momento en que el Estado funciona sobre la base del biopoder, el Estado solo puede matar con la justificación de racismo. Que quede bien claro que cuando habla de homicidio el autor no piensa simplemente en el asesinato directo, sino todo lo que puede ser también muerte indirecta: el hecho de exponer a la muerte o de multiplicar para algunos el riesgo de muerte, o más simplemente, la muerte política, la expulsión.

El racismo está pues ligado con el funcionamiento de un Estado que está obligado a valerse de la raza, de la eliminación las razas o de la purificación de la raza para ejercer su poder soberano. El funcionamiento, a través del biopoder, del viejo poder soberano del derecho de muerte, implica el funcionamiento, la instauración y la activación del racismo.
Desde mi punto de vista, esto se ve muy claro actualmente, las frases de Foucault sirven para abrir las mentes de las personas modernas, que no se preocupan por lo que sucede ni porque sucede. Vemos que el racismo es la escusa perfecta para agredir a los demás, hoy en día la discriminación latente es cada ves mayor, ya no solo es una discriminación sino que ya es una escusa para agredir al otro y perjudicarlo con cada acción que realiza el hombre, aquel hombre que se considera a sí mismo superior.
Asi uno no vive ni deja vivir, se contrapone con la biopolítica pues en vez de aprovechar o controlar su vida se dedica integramente a dañar la vida de la raza que cree inferior. Pero bien es el estado principal propulsor de esta situación y la utiliza como princiio de guerra.


viernes, 10 de agosto de 2007

Etica Protestaste: Capitalismo

El espíritu del capitalismo introduce al hombre en una avaricia incontrolable, la avaricia es un pecado, por lo que no agrada a Dios.
En el libro de San Lucas 12, versículos 13 al 21, observamos que Jesús mediante el uso de Parábolas aclara al hombre evitar la avaricia o el enriquecerse a si mismo hasta mas no poder. Para así fomentar un desarrollo del alma y no de las satisfacciones terrenas.
De que sirve al hombre, acumular riquezas si a la hora de encontrarse con Dios no las puedo llevar consigo. Bien las disfruta en la tierra, vida temporal e imperfecta, pero cuando llegue a la eternidad no le serán útiles.
Mirando con ojos capitalistas podría decir que la homilía de Basilio Magno, un tanto utópica, no serviría de nada. Dicha homilía refiere lo siguiente: "El que roba la ropa de otro se llama ladrón. ¿Merece otro nombre el que no viste al desnudo si lo puede hacer? El pan que te sobra pertenece al hambriento. La ropa que guardas en tu ropero pertenece al desnudo. Los zapatos que se pudren en tu casa son del descalzo. El dinero que tienes enterrado pertenece al necesitado. Estas haciendo injusticia a todos los que puedes ayudar".
Como decía no sirve de nada pues aquel capitalista no compartiría con el prójimo por mas que le sobre, porque la acumulación de riquezas es su principal meta, busca trabajar cada vez más y así poder ganar dinero, el afán de lucro que lo domina no le permitiría ayudar a otros mientras que su situación marche lo mejor posible.
Pienso que en las sociedades postmodernas este pensamiento predomina sobre los hombres, no viven solo trabajan y trabajan descuidando otros aspectos sumamente importantes como sera la interacción con las familias y amigos, tambien se ve que ya no existe la solidaridad que plantea la Doctrina Social de La Iglesia, el ponerse en el lugar del otro, si no mas bien ponerme en mi propio lugar y beneficiarme nada mas que a mi, es así como marcha el mundo, yeno de codicia y avaricia los hombres solo se lastiman unos a otros.
Ahora bien con un poco de conciencia humanitaria por parte de cada uno se podrían lograr muchas cosas.. pero bien ¿Como hacerlo? Queda a criterio de cada mente. Solo agrego que no descuiden esos aspectos detallados arriba pues son los que en verdad nos hace felices.

viernes, 6 de julio de 2007

Gran Hermano

Gran Hermano

La novela de George Orwell, escrita en 1984 y editada en 1949, conocida como “1984” reflejó la historia de un estado totalitario que obligaba a la población a cumplir sus leyes y normas mediante la propaganda, el miedo y el castigo, características propias de estos regimenes. La novela introdujo el concepto del tan conocido Gran Hermano como figura de un líder autoritario, juez pagano que regula el accionar y el comportamiento de toda la sociedad, pero el cual ni siquiera se sabe que existe realmente. Él es la encarnación de los ideales del Partido, el Partido único y todopoderoso que vigila sin descanso.
En las Sociedades actuales se dio por imitar a este líder, y representarlo a través de programas televisivos de mucho raiting, como sabemos estos programas encrudecidos por el capitalismo y la cultura de masas dio como resultado una televisión netamente comercial, que según afirma el escritor Umberto Eco aplican siempre las medidas de gusto necesarias, es decir apuntan a lo que la gente puede gustarle hoy en día.
La población postmoderna esta inspirada en lo económico, como establece la autora Beatriz Sarlo, más que en cualquier otro tipo de desarrollo, busca llenar sus vacíos con bienes materiales que pasan a ser fetiches, mediante los cuales alcanzarían la felicidad. Se preocupa por lo individual y por lograr un hedonismo completo que solo alcanza mediante el consumismo.
Los programas televisivos inspirados en esto, desarrollan contenidos vacíos en intelectualismo que puedan entorpecer aun más al hombre, y de esta manera volverse a tal punto dependientes que consumen todo lo que ellos le presentan. Así entre muchos de estos programas encontramos el antes nombrado “Gran Hermano” que por la globalización se expandió prácticamente a todo el mundo con resultados en clientela mejores de los esperados, y la rareza del caso es que recibe este nombre por el hecho de cumplir la función del líder de 1984, pero en realidad es la convivencia de varias personas vigiladas todo el tiempo por este ciudadano-dios-vigilante, entre las cuales se observa una relación competitiva por ver quien gana el juego, mas que una relación tan primaria como lo es la de dos hermanos.
En cada sociedad, en cada cultura predominan en puntos los famosos Big Brothers, el enriquecimiento mundial de las deferencias culturales no sirvió de nada, en todas abunda el show.
Ahora bien, la permanencia de gente común por un período tan largo supone la típica “quitarse las mascaras” y ser quienes realmente son, las personas comunes quizás lo son pero entre ellas deben existir constantes conflictos para no aburrir al público, en cambio últimamente se recurre a métodos parecidos de atracción popular con la participación, no ya de gente común, sino “famosos” en los cuales se intenta conocer, aún mas que antes, sus personalidades, pero nuevamente se entreteje una problemática fija.
Como en la televisión existen un sinfín de entretenimientos parecidos, cada uno recurre a métodos distintos para ganar una supremacía en la TV, Gran Hermano es el típico show que intenta a través de todo tipo de juegos captar la atención de su público, se aplican juegos u organizan fiestas en días que se realizan fiestas en la vida real para que el televidente solo las vea pero así se priva de participar en una real y sana; en la desnudez no es lo primordial.
Y el hecho de estar mirando dicho programa no introduce a su espectador en esa realidad paralela ni le permite vivir o desear esa vida. Es decir no por mirarlo nos sucederá lo mismo. O muchas veces se equiparan con los participantes y creen identificarse con ellos, cuando verdaderamente ni siquiera es la vida real de ese participante.
Entonces ¿sería Gran Hermano un programa interesante? Tal vez lo sea para aquellos que disfrutan ver lo que otros hacen pero verdaderamente no lo es, la ausencia de contenido y la competencia detonante lo hace tan monótono que para aquellos que percatan esto se torna aburrido.

miércoles, 4 de julio de 2007


Esta comedia quiere mostrar la realidad que hoy en día se esta viviendo....
Los jóvenes al igual que todas las personas encontramos en la televisión una especie de totem tecnológico, como afirma la escritora Beatríz Sarlo, y la única forma de captar nuestra atención son recurriendo a métodos parecidos a los de la TV

martes, 3 de julio de 2007

El mundo moderno



El mundo moderno es un mundo extremadamente capitalista que vigila su accionar y se maneja mediante el consumismo. El hombre deja de ser un ser social y pasa a ser individual solo se preocupa por su bienestar pisoteando a todos los que puedan significar "una piedra en el camino" es decir se concentra en alcanzar un hedonismo que satisface con el consumismo. Por esto en su afán de lucro persigue objetos materiales que le sirvan para sentirse mejores consigo mismo....
Ante esto el hombre queda preso de sus individualidades y del egoísmo que genera.